Del picking eficiente a la planificación de rutas : cómo e-PackSGA y Routal optimizan la preparación y entrega de forma unificada

En la logística moderna, almacén y distribución ya no son mundos separados. La planificación inteligente de rutas está transformando la forma en que se preparan los pedidos en el almacén y cómo se cargan los camiones para la entrega. En este artículo exploraremos, con un lenguaje claro, cómo la integración entre Routal (software de optimización de rutas) y el SGA e-PackSGA de Grup Micros conecta la preparación de pedidos con la última milla. Veremos cómo esta sinergia permite planificar rutas automáticamente, optimizar el proceso de picking en almacén y agilizar la carga de camiones mediante el método LIFO (Last In, First Out). También introduciremos conceptos logísticos clave –trazabilidad, optimización del layout del almacén y cross-docking– para aportar valor práctico a la gestión de almacenes y la distribución de última milla.

Planificación de rutas y picking: ¿por qué van de la mano?

Tradicionalmente, la preparación de pedidos (picking) en el almacén y la planificación de rutas de reparto se han gestionado por separado. El almacén preparaba los pedidos en el orden que llegaban, y luego el departamento de transporte organizaba las entregas. Este enfoque puede generar ineficiencias: a veces el primer pedido listo resulta ser el último que debe entregarse, obligando a reorganizar la carga del camión o a que el repartidor busque cajas entre un caos de pedidos.

¿Cómo impacta la planificación de rutas en el picking? Imaginemos un almacén con 50 pedidos para entregar en una ciudad. Sin una coordinación adecuada, los operarios de almacén podrían ir recogiendo productos “a medida que llegan los pedidos” sin considerar a dónde irán. El resultado: al cargar el camión, los pedidos se encuentran desordenados respecto a la secuencia de reparto. Esto supone más tiempo en el muelle de carga reordenando pallets o cajas, riesgo de errores en las entregas (pedidos fuera de orden) y pérdidas de tiempo en ruta (repartidor mirando continuamente cajas y más cajas, hasta encontrar la correcta).

Al integrar la planificación de rutas desde el inicio, cambiamos este panorama. Si sabemos de antemano la ruta óptima del camión, podemos preparar los pedidos en el mismo orden inverso a las paradas de entrega. En otras palabras, el almacén realiza el picking siguiendo la secuencia que necesitará el transportista. Así, la logística interna del almacén se alinea con la logística de distribución desde el primer momento, reduciendo tiempo y ganando eficiencia.

Integración de Routal con e-PackSGA: un flujo conectado de almacén a última milla

La solución a esta coordinación es conectar las herramientas de almacén y de transporte en un solo flujo digital. Aquí es donde entra en juego la integración entre e-PackSGA (el Sistema de Gestión de Almacenes de Grup Micros) y Routal (plataforma de planificación de rutas). ¿Qué significa esto en la práctica? Que el SGA y el optimizador de rutas “hablan el mismo idioma” y trabajan sincronizados.

¿Cómo funciona esta integración? En términos sencillos, cuando llegan pedidos nuevos al SGA e-PackSGA, este sistema no solo gestiona su preparación interna, sino que envía la información a Routal para calcular la mejor ruta de reparto en segundos. Routal procesa direcciones, ventanas de entrega, capacidades de camión, prioridades y devuelve un plan de ruta óptimo (orden de paradas). Automáticamente, e-PackSGA recibe ese orden y organiza la lista de picking de acuerdo a la ruta.

Por ejemplo, si Routal determina que las entregas deben hacerse en el orden: Cliente X, luego Cliente Y y finalmente Cliente Z, el SGA e-PackSGA ajustará la secuencia de preparación para que el pedido de Cliente Z se prepare primero y el de Cliente X al final. De este modo, los pedidos salen del almacén ya ordenados según la ruta óptima. El personal de almacén simplemente sigue las indicaciones del SGA (por dispositivo móvil, listas o PDA) tomando los productos en el orden indicado, y deposita cada pedido preparado en la zona de expedición correspondiente, listo para cargar en el camión según esa secuencia.

Beneficios inmediatos de un flujo integrado

Al alinear la preparación con la entrega, esta integración aporta múltiples beneficios operativos sin añadir complejidad para el personal (al contrario, la reduce). Algunos de los beneficios clave son:

• Pedidos listos más rápido: El picking se agiliza porque el SGA guía a los operarios con un orden claro. Se eliminan dudas sobre qué preparar primero. Esto reduce tiempos muertos y acelera la preparación de pedidos.

• Carga de camiones sin complicaciones: Al estar los pedidos ordenados según la ruta, la carga es directa y eficiente. No hay que buscar ni reordenar paquetes; el camión se carga siguiendo la secuencia indicada.

• Entregas más ágiles y menor coste: Routal calcula rutas optimizadas que reducen kilómetros recorridos y tiempo en carretera. Esto puede traducirse en ahorros de hasta un ~30% en costes de distribución (menos combustible, mayor productividad de cada ruta) y entregas dentro del horario previsto.

• Menos errores y máxima trazabilidad: Al tener un flujo único de datos, cada pedido está identificado y localizado en todo momento. La integración reduce la intervención manual (y por tanto los errores de dirección o carga) y ofrece trazabilidad completa desde el almacén hasta la entrega final.

• Operación más sostenible: Rutas más cortas y camiones más llenos implican menos viajes y emisiones. Optimizar no solo ahorra dinero, sino que también reduce la huella de carbono de la distribución, sin afectar el servicio al cliente.

En resumen, unir e-PackSGA con Routal crea un circuito cerrado donde cada pedido “nace” en el almacén con su ruta de entrega ya asignada. Veamos con más detalle algunos aspectos clave de esta optimización, como la preparación secuenciada (LIFO) y otros conceptos logísticos que potencian la cadena.

Preparación de pedidos secuenciada y carga LIFO (Last In, First Out)

Una de las principales mejoras al planificar rutas automáticamente es poder aplicar el método LIFO (Last In, First Out) en la carga de los pedidos. LIFO en logística de reparto significa que el último pedido en entrar al camión será el primero en salir para entrega. Este concepto, que suena técnico, se comprende fácil con un ejemplo práctico:

Ejemplo: Pensemos en un camión que debe entregar en 3 paradas: primero en la Parada A, luego B y finalmente C. Siguiendo LIFO, cargaremos primero los paquetes del destino C (fondo del camión), luego los de B, y al final los de A, cerca de la puerta. ¿Qué logramos? Que al llegar a la Parada A (que es la primera entrega en ruta), sus paquetes estén al alcance, listos para descargar inmediatamente, sin mover cajas de otras entregas. Cada vez que el camión avance a la siguiente parada, los pedidos correspondientes estarán arriba o más accesibles, porque fueron cargados al final en el almacén.

Con la integración Routal + e-PackSGA, este proceso se automatiza totalmente. Dado que e-PackSGA prepara los pedidos en el orden inverso a las entregas planificadas por Routal, el camión se carga naturalmente aplicando LIFO: los últimos pedidos preparados (últimos en cargarse) son justo los primeros que deberán entregarse. El resultado es una carga optimizada donde no es necesario reordenar nada a mano. Esto ahorra tiempo en el muelle de carga y sobre todo simplifica la vida al conductor durante el reparto, evitando que tenga que rebuscar pedidos.

Además, la secuencia de carga optimizada contribuye a maximizar el espacio y estabilidad en el vehículo. Los paquetes se acomodan de forma que los destinos finales queden al fondo y los primeros destinos al frente. Junto con otras buenas prácticas (como distribuir el peso uniformemente y asegurar la carga con correas), la empresa logra camiones cargados de forma segura y eficiente. En pocas palabras: la primera entrega del día es lo último que sube al camión.

Trazabilidad total: seguir el pedido de principio a fin

Otro aporte fundamental de la tecnología en esta integración es la trazabilidad. En logística, trazabilidad significa poder seguir el rastro de cada pedido a lo largo de todo el proceso, desde que se prepara hasta que llega al cliente. La integración entre el SGA y el planificador de rutas facilita una trazabilidad unificada, lo que aporta control y confianza en la operación.

¿Cómo se manifiesta esto? Por ejemplo: cada pedido, al ser preparado con e-PackSGA, puede llevar una etiqueta con código de barras o QR que contiene su información de envío (ruta, cliente, secuencia de entrega, etc.). Cuando ese pedido se carga en el camión, el sistema registra qué vehículo lo lleva y en qué orden de entrega está. Después, durante la última milla, Routal permite monitorizar en tiempo real la ubicación del camión y el estado de cada entrega (por ejemplo, “En ruta”, “Entregado”, “Incidencia”). Toda esta información fluye de vuelta al sistema, de forma que tanto el operador logístico como el cliente pueden conocer el estado exacto del pedido en cada momento.

La trazabilidad completa aporta varios valores añadidos:

• Detección de incidencias rápidamente: Si un pedido no se pudo entregar o hay algún retraso, el sistema lo refleja instantáneamente. Esto permite reaccionar (reprogramar la entrega, informar al cliente) con agilidad.

• Histórico y mejora continua: Al recopilar datos desde la preparación al reparto, es posible analizar tiempos de picking, tiempos de entrega, rutas realizadas, etc. Identificar cuellos de botella es más sencillo con estos datos integrados.

• Confianza del cliente: Informar al cliente final sobre el recorrido de su pedido (por SMS, email o portal web) mejora su experiencia. Por ejemplo, gracias a Routal el cliente podría recibir una notificación de “Tu pedido está en camino, siguiente parada en aprox. 30 minutos”, lo que añade transparencia y profesionalidad al servicio.

• Gestión de las devoluciones: Cuando un cliente rechaza una entrega, el almacén ya puede estar preparando la entrada de mercancía y la gestión de esa devolución, antes incluso de haberla recibido. Por ejemplo, dejando huecos cercanos al muelle de descarga para descargar rápidamente el camión.

En suma, la trazabilidad habilitada por e-PackSGA + Routal significa que ningún pedido “se pierde de vista” en ningún punto. Desde el estante en el almacén hasta la puerta del cliente hay un hilo digital que lo identifica y ubica.

Cross-docking: preparación y distribución sin escalas

Otro concepto logístico avanzado que vale la pena mencionar es el cross-docking. El cross-docking es una estrategia donde la mercancía pasa directamente de la recepción a la expedición, con mínima o ninguna almacenaje intermedio. En otras palabras, los productos que llegan al almacén (por ejemplo, de proveedores o de un centro de distribución) se asignan inmediatamente a pedidos de salida y se cargan en otro camión para entrega, sin colocarlos en estanterías a largo plazo. Es como hacer un “transbordo” rápido de la mercancía.

¿En qué beneficia esto? Principalmente en agilizar tiempos y reducir costes de almacenamiento. Si implementamos cross-docking correctamente, logramos:

• Menos inventario en almacén: La mercancía no se queda ocupando espacio ni inmovilizando capital; pasa al camión de reparto pronto.

• Preparación más rápida: Se eliminan pasos como ubicaciones temporales o doble manipulación. No se realiza un picking tradicional porque la mercancía entrante ya está destinada a una salida.

• Entrega más fresca: Ideal para productos perecederos o muy urgentes, ya que acortamos el ciclo de entrega. También útil en promociones o lanzamientos donde se quiere llegar a tienda/cliente final rápidamente.

Ahora bien, ¿cómo encaja la planificación de rutas y la integración e-PackSGA + Routal aquí? Para que el cross-docking funcione, la coordinación y sincronización de la cadena debe ser excelente. La integración con Routal aporta la capacidad de, en cuanto llega la mercancía, asignarla a rutas de entrega óptimas al instante. Por ejemplo, si un camión de proveedor entrega 100 unidades del producto X y ya hay pedidos pendientes de ese producto, el SGA e-PackSGA (sabiendo esto) podría generar directamente órdenes de envío y solicitar a Routal las rutas para distribuir esos pedidos en el mismo día. Routal planificará las entregas considerando las nuevas mercancías y devolviendo el orden de carga. Así, el personal de almacén en modo cross-dock simplemente mueve el pallet o caja recibida directamente al muelle de salida correspondiente a la ruta asignada, donde se carga en el vehículo de reparto casi de inmediato.

El cross-docking exige también que sistemas y actores estén integrados: proveedores, almacén, transportes. Aquí nuevamente la dupla SGA + planificador de rutas es clave. e-PackSGA proporciona la visibilidad de qué llega y qué sale, y Routal asegura que lo que sale vaya por el mejor camino posible. En esencia, el cross-docking potencia el efecto de la integración: cuando es posible evitar incluso el almacenaje, la planificación inteligente conecta directamente la oferta entrante con la demanda saliente, en cuestión de minutos.

Última milla optimizada: entregas más rápidas y clientes satisfechos

Toda esta coordinación entre almacén y transporte tiene un objetivo final: mejorar la distribución de última milla, que es el tramo final hasta el cliente. La última milla suele ser la más costosa y compleja de la cadena logística (muchos destinos, tráfico urbano, ventanas horarias estrechas). Por eso, cada ganancia de eficiencia cuenta.

Con Routal generando rutas optimizadas y adaptándose a restricciones (horarios de clientes, capacidad del vehículo, prioridades de entrega, tráfico en tiempo real) y e-PackSGA asegurando que los pedidos estén preparados conforme a ese plan, la última milla se vuelve mucho más fluida. Los repartidores tienen rutas lógicas, sin idas y vueltas innecesarias, y encuentran el camión cargado correctamente. Esto les permite centrarse en conducir y entregar, en lugar de planear sobre la marcha o buscar paquetes.

Una ruta bien planificada reduce imprevistos como llegar a un punto y descubrir que el paquete de ese cliente está enterrado bajo otros. Menos imprevistos significan cumplir con los plazos de entrega prometidos de forma más consistente. Desde la perspectiva del cliente final, esto se traduce en mayor satisfacción: reciben sus pedidos a tiempo, enterados del estado (gracias a la trazabilidad) y en buenas condiciones (menos manipulación brusca al no tener que reorganizar carga).

Además, al optimizar kilómetros recorridos, las empresas suelen poder incrementar el número de entregas por ruta o por jornada, sin añadir recursos extra. Por ejemplo, si antes un repartidor entregaba 30 pedidos al día en un recorrido subóptimo, con la planificación inteligente quizá pueda atender 40 en menos tiempo. Esa productividad extra puede significar ampliar cobertura, asumir más volumen de ventas, o simplemente ahorrar costos de combustible y horas de conducción.

Conclusión: tecnología y planificación inteligente mejoran la cadena logística de punta a punta

La integración de un SGA como e-PackSGA con un optimizador de rutas como Routal demuestra cómo la tecnología puede romper los silos entre almacén y transporte, creando una cadena logística continua y altamente eficiente. Al planificar rutas automáticamente y llevar ese conocimiento al proceso de picking, se logra un efecto dominó positivo: el almacén prepara mejor, los camiones se cargan más rápido y ordenados (gracias al LIFO y a la secuencia óptima), y las entregas de última milla se realizan con agilidad y control total.

Hemos visto que conceptos logísticos clásicos –como LIFO, trazabilidad o cross-docking– cobran nueva vida y potencia cuando se combinan con herramientas modernas integradas. Menos tiempos de espera, menos kilómetros recorridos, menos errores, más visibilidad. En definitiva, operaciones más ágiles y clientes más satisfechos.

En la práctica, adoptar este tipo de soluciones e integraciones significa que la empresa puede ofrecer un mejor servicio con igual o menor costo operativo, lo que se traduce en una ventaja competitiva. Un flujo logístico donde “lo que pasa en el almacén” y “lo que pasa en la calle” están coordinados al segundo es, sin duda, el objetivo que toda compañía de distribución persigue.

¿El mensaje clave? La planificación inteligente, apoyada por la tecnología adecuada, mejora toda la cadena de preparación y entrega de pedidos. Desde el momento en que un pedido entra al sistema hasta que el cliente lo tiene en sus manos, cada paso puede optimizarse. Routal y e-PackSGA lo ilustran claramente: uniendo fuerzas permiten que la logística trabaje como un reloj, simplificando tareas y elevando la calidad del servicio.

¡Es hora de decir adiós a las cargas desordenadas y a las rutas improvisadas! Con soluciones integradas como estas, incluso profesionales no técnicos pueden ver cómo su almacén “piensa” en la ruta de reparto, y cómo cada reparto se alimenta de datos del almacén. El resultado: una logística eficaz, transparente y preparada para los desafíos de la última milla.

‍